NOTA DE PRENSA: EL PROGRAMA DE PRÁCTICAS DEL COLEGIO DE SAN FRANCISCO DE PAULA, SELECCIONADO COMO CASO DE ÉXITO DE INNOVACIÓN EDUCATIVA EN UN CONGRESO INTERNACIONAL EN LISBOA


NOTA DE PRENSA

EL PROGRAMA DE PRÁCTICAS DEL COLEGIO INTERNACIONAL DE SEVILLA - SAN FRANCISCO DE PAULA, SELECCIONADO COMO CASO DE ÉXITO DE INNOVACIÓN EDUCATIVA EN UN CONGRESO INTERNACIONAL EN LISBOA

Es el primer centro educativo español que lo contempla como parte obligatoria del plan de estudios de Bachillerato.

Los alumnos valoraron con un 9,3 sobre 10 el enriquecimiento personal recibido y en un 9,26 la superación de las expectativas iniciales.

Esta experiencia permitió a algunos alumnos ampliar el abanico de sus intereses profesionales y a otros les llevó incluso a cambiar la modalidad de Bachillerato.

En la primera edición del programa participaron 94 estudiantes que hicieron sus prácticas en 64 organizaciones.

Esta pionera iniciativa está respaldada por un plan formativo que incluye formación jurídica, económica y empresarial, así como la creación de currículos y simulaciones reales de entrevistas de trabajo por los propios alumnos.

Sevilla, abril de 2019.- El Programa de Prácticas en Organizaciones para alumnos de Bachillerato puesto en marcha por el Colegio Internacional de Sevilla - San Francisco de Paula durante el curso 2017-2018 ha sido hoy objeto de una ponencia en un congreso internacional educativo en Lisboa que está teniendo lugar entre el 24 y el 27 de abril con la participación de casi 300 profesores y gestores educativos de más de 30 países de todo el mundo. Dicho programa fue una innovación educativa introducida por este Centro con la intención de permitir a los alumnos tener un primer contacto con el mundo laboral más temprano de lo habitual, ayudarles a orientar sus estudios universitarios, fomentar su autoestima y el desarrollo de habilidades sociales en un entorno desconocido e incentivar el conocimiento de los intereses propios, entre otros objetivos.

En España hay muy pocos centros educativos que ofrecen a los alumnos la posibilidad de hacer prácticas antes de la universidad, pero todos ellos lo han hecho hasta ahora como algo opcional y voluntario. El Colegio Internacional de Sevilla - San Francisco de Paula ha sido el primero en incluirlo como parte del plan estudios de Bachillerato y los resultados, en la primera edición del programa, han sido “muy satisfactorios, a tenor de las encuestas de valoración contestadas por los propios alumnos y las entidades participantes”, según la responsable del programa, Victoria Barros, que reconoce que “a pesar de las reticencias iniciales de los alumnos fueron vencidas en cuanto los alumnos empezaron con sus prácticas”.

En concreto, los alumnos valoraron su experiencia con un 8.68 sobre 10, puntuando el enriquecimiento personal percibido con un 9.3; la satisfacción en relación con la expectativa inicial con un 9,23; el esfuerzo realizado por el Colegio para implementar con éxito el Programa con un 9.13 y el interés de las tareas realizadas y de la percepción de la organización donde desarrollaron sus prácticas con un 9.6.

La calificación media recibida por los alumnos en la primera edición fue de 9.76 en el criterio de actitud y colaboración y de 9.70 en el criterio de análisis y reflexión, siendo las propias organizaciones las que se encargaron de la evaluación del alumno a partir de criterios de evaluación específicamente diseñados para desarrollar la iniciativa. Más allá de estos resultados cuantitativos, la experiencia fue tan interesante y reveladora para los alumnos que algunos cambiaron de modalidad de bachillerato tras la realización de las prácticas y otros reconocieron que les habían ayudado a perfilar su vocación profesional. Algunos de los alumnos estaban tan motivados con el Programa que extendieron el período de prácticas (a pesar de que este se desarrolla en las que antes eran las dos semanas primeras de vacaciones, motivo principal de las reticencias iniciales a esta iniciativa).

En total, fueron 94 estudiantes los que participaron en esta primera edición del Programa de Prácticas, de dos semanas de duración y desarrollado en organizaciones de diferente tipología: desde empresas de sectores muy diferentes (ingeniería, abogacía, medicina, consultoría tecnológica, marketing digital, comunicación…) hasta universidades, centros de investigación, ONGs y fundaciones. Además de ser parte obligatoria del plan de estudios de los alumnos de Year 11 (el equivalente a 1º de Bachillerato español), esta experiencia se ofrece también de manera opcional a los alumnos de los niveles 10 (el equivalente a 4º de ESO) y 12 (2º de Bachillerato), así como a antiguos alumnos de hasta 25 años de edad. De los 94 participantes de la primera edición, 75 alumnos lo hicieron como parte de su expediente académico obligatorio y otros 19 alumnos lo realizaron de forma voluntaria, siendo 12 de ellos alumnos de Year 10, 2 alumnos de Year 12 y 5 antiguos alumnos.

Las dos semanas de prácticas, que están reguladas mediante un convenio firmado con todas las entidades participantes y en el que se incluye una cláusula por la que el Colegio asume el coste del seguro de los alumnos, están respaldas además por un plan formativo con contenidos de carácter jurídico, económico-financiero, de creación de CV y de simulación de entrevistas de trabajo, que proporcionan un contexto y una introducción a los alumnos para su inmersión en el mundo laboral. En el presente curso, se ha añadido también una sesión de autoconocimiento para que los alumnos tengan las herramientas necesarias para identificar sus fortalezas y debilidades.

Durante sus prácticas, los alumnos conocen de primera mano en qué consiste el día a día en la organización, así como los procesos y tareas que se llevan a cabo, el organigrama y las obligaciones de los trabajadores. Además, tienen la oportunidad de involucrarse algunas tareas y proyectos en curso, bajo la supervisión del tutor designado por la organización.

A fin de que los alumnos tengan mayor probabilidad de acertar escogiendo las prácticas más acordes a sus intereses, el Colegio celebra además, de forma previa, en sus propias instalaciones, una Feria en la que las organizaciones colaboradoras explican a los estudiantes y a sus familias la naturaleza de su actividad. Una vez celebrada esta Feria, los alumnos tienen la posibilidad de solicitar hasta cinco de las plazas ofertadas según su orden de preferencia en un formulario online. Tras ello, es la propia organización la que elige cuál de los tres alumnos (por cada plaza ofertada) realizará las prácticas con ellos, a fin de que los alumnos se acostumbren a los procesos reales de selección en el mundo profesional. En caso de ser seleccionado por varias organizaciones como candidato final, es el alumno el que elige con cuál de las opciones quedarse. En resumen, cada alumno realiza un máximo de tres entrevistas y cada organización entrevista a un máximo de tres alumnos por plaza ofertada. En el caso de que el alumno no fuera seleccionado por ninguna de las tres organizaciones en las que ha realizado las entrevistas, se cotejarían nuevas opciones según la naturaleza de sus intereses.

Posteriormente, en cada organización, se le asigna un tutor a cada alumno que guía y le hace seguimiento al estudiante durante su estancia. A medida que los alumnos realizan su periodo de prácticas, escriben en un Diario de Trabajo (diseñado específicamente para el Programa), en el que describen las tareas realizadas cada día, qué les ha aportado y qué han aprendido. A su vez, el tutor evalúa al estudiante en el diario de trabajo e indica aspectos de mejora del Programa, así como su opinión sobre la experiencia. A lo largo del periodo de prácticas, se realiza un control exhaustivo por parte del Colegio para verificar la asistencia y el cumplimiento de las tareas encomendadas a los alumnos, visitando de manera aleatoria y sin previo aviso las organizaciones. Asimismo, para llevar a cabo la iniciativa de la manera más provechosa posible, el Colegio diseñó un modelo de evaluación específico basado en criterios de aprovechamiento y descriptores de nivel. Estos criterios son utilizados por los tutores de las organizaciones para calificar a los alumnos, teniendo en cuenta parámetros de actitud y colaboración (asistencia, puntualidad, uso), así como de análisis y reflexión (redacción del ya comentado Diario de Trabajo).

“El hecho de enfrentarse a una rutina de trabajo durante dos semanas siendo un estudiante de entre 15 y 25 años, es una experiencia que no se logra desde un pupitre y que puede marcar la diferencia a la hora de buscar empleo en el futuro”, explica Victoria Barros, para quien, con este programa, “los alumnos obtienen un mayor grado de seguridad a la hora de encaminar sus estudios y su vida profesional así como un mayor grado de madurez como consecuencia de la necesidad de cumplir con unos horarios y unas tareas dentro de una organización”.

Desarrollado en colaboración con la Fundación Goñi y Rey, el Colegio Internacional de Sevilla- San Francisco de Paula se propone también con este Programa abrir su proyecto educativo a la sociedad, rompiendo con esa brecha tradicional entre el mundo académico y profesional. La incorporación de estas prácticas, por otro lado, es completamente consecuente con el Plan de Estudios en los niveles precedentes, el cual, siguiendo los programas del Bachillerato Internacional y aprovechando la autonomía de actuación que le concede su estatuto de centro extranjero, hace hincapié en las competencias relacionadas con la creatividad, la indagación y la aplicación del conocimiento en problemas de la vida real.

Para más información:
José Antonio G. Andrés / 663 410 014